
El término Biblia se refiere a la colección de escritos que la Iglesia de Dios ha reconocido solemnemente como inspirados. Se llama Biblia al conjunto de escritos que en el judaísmo y el cristianismo se consideran de un valor religioso superior. La palabra Biblia se deriva del griego biblia, plural de biblíon, “librito”. La Biblia es, pues, una pequeña biblioteca. La Biblia que los cristianos reconocen se compone de dos grandes secciones llamadas respectivamente Antiguo y Nuevo Testamentos. El Antiguo Testamento consta de 46 libros y el Nuevo Testamento de 27 libros.
- ¿Qué es la Biblia?
- ¿Qué es la Biblia? - Los Autores
- ¿Qué es la Biblia? – Las Divisiones
- ¿Qué es la Biblia? – El Carácter Central
- ¿Qué es la Biblia? - Un Breve Resumen
- Biblia: Preguntas y Respuestas
- Recomendaciones para leer la Biblia
- Si tengo la Biblia, ¿para qué necesito la Iglesia?
- ¿A quién fue confiada la Revelación?
- ¿Por qué decimos que la Biblia es revelación de Dios?
- ¿Qué es la Tradición?
- ¿Qué contiene el Antiguo Testamento?
- ¿Qué contiene el Nuevo Testamento?
- ¿Qué otras Biblias existen?
- ¿Puede leerse cualquier Biblia?
La Biblia se divide en dos partes: Antiguo Testamento (antes de Cristo) y Nuevo Testamento (plenitud de la promesa en Cristo). "Testamento" significa "alianza" y se refiere a las alianzas que Dios pactó con los Israelitas en el Antiguo Testamento y la nueva y definitiva alianza que Dios hizo con los hombres en la Sangre de Jesucristo.
Setenta
y tres diferentes libros forman la Biblia.
Éstos incluyen libros sobre la ley, tales como Levítico
y Deuteronomio; libros históricos, tales como Esdras y Hechos;
libros de poesía, tales como Salmos y Eclesiastés;
libros de profecía, como Isaías y Apocalipsis;
biografías, como Mateo y Juan; y epístolas (cartas
formales) como Tito y Hebreos.
¿Qué
es la Biblia? - Los Autores
Cerca
de 40 diferentes autores humanos contribuyeron para su formación,
escrita dentro de un período aproximado de 1,500 años.
Los autores fueron reyes, pescadores, sacerdotes, oficiales
gubernamentales, granjeros, pastores y doctores. Toda esta diversidad
converge en una increíble unidad, con temas comunes
entrelazados a través de toda ella.
La unidad de la
Biblia es debida al hecho de que, finalmente, tiene un Autor: Dios
Mismo. La Biblia es “Inspirada por Dios” (2 Timoteo
3:16). Los autores humanos escribieron exactamente lo que Dios quiso
que escribieran, y el resultado fue la perfecta y santa Palabra de
Dios (Salmo 12:6; 2 Pedro 1:21).
¿Qué
es la Biblia? – Las Divisiones
La
Biblia está dividida en dos partes principales: El Antiguo
Testamento y el Nuevo Testamento. En resumen, el Antiguo Testamento
es la historia de una Nación, y el Nuevo Testamento es la
historia de un Hombre. La Nación fue la manera en que Dios
trajo al Hombre al mundo.
El Antiguo Testamento describe la
fundación y preservación de la nación de Israel.
Dios prometió utilizar a Israel para bendecir al mundo entero
(Génesis 12:2-3). Una vez que Israel fue establecida como una
nación, Dios levantó a una familia de entre esa nación
a través de la cual vendrían las bendiciones: la
familia de David (Salmos 89:3-4). Entonces, de la familia de David
fue prometido un Hombre quien traería la bendición
prometida (Isaías 11:1-10).
El Nuevo Testamento detalla
la venida del Hombre prometido. Su nombre fue Jesús, y Él
cumplió la profecías del Antiguo Testamento, porque
vivió una vida perfecta, murió para convertirse en el
Salvador, y resucitó de entre los muertos.
¿Qué
es la Biblia? – El Carácter Central
Jesús
es el carácter central en la Biblia – en realidad el
libro entero es acerca de Él. El Antiguo Testamento predijo Su
venida y preparó el escenario para Su entrada al mundo. El
Nuevo Testamento describe Su venida y Su obra para traer salvación
a nuestro mundo pecador.
Jesús
es más que una figura histórica; de hecho, Él es
más que un hombre. Él es Dios hecho carne, y Su venida
fue el evento más importante en la historia del mundo. Dios
Mismo se hizo hombre para darnos una clara y entendible imagen de lo
que Él es. ¿Cómo es Dios? Dios es como Jesús;
Jesús es Dios en forma humana (Juan 1:14; 14:9).
¿Qué
es la Biblia? - Un Breve Resumen
Dios
creó al hombre y lo puso en un ambiente perfecto; sin embargo,
el hombre se reveló contra Dios y falló en llegar a ser
lo que Dios quería que fuera. Dios puso al mundo bajo una
maldición a causa del pecado, pero inmediatamente puso en
acción un plan para restaurar al hombre y a toda la creación
a su gloria original.
Como parte de Su plan de redención,
Dios llamó a Abraham desde Babilonia a Canaán
(aproximadamente 2000 a.C.). Dios prometió a Abraham, su hijo
Isaac, y su nieto Jacob (también llamado Israel) que Él
bendeciría al mundo a través de sus descendientes. La
familia de Israel emigró de Canaán a Egipto, donde se
multiplicaron hasta hacerse una nación.
Aproximadamente
en 1400 a. C-. Dios guió a los descendientes de Israel fuera
de Egipto bajo la dirección de Moisés y les dio la
Tierra Prometida, Canaán, para que la poseyeran. A través
de Moisés, Dios le dio la Ley al pueblo de Israel e hizo un
pacto (convenio) con ellos: si ellos permanecían fieles a Dios
y no seguían la idolatría de las naciones que les
rodeaban, entonces ellos prosperarían. Si ellos dejaban a Dios
y seguían a los ídolos, entonces Dios destruiría
su nación.
Aproximadamente 400 años después,
durante el reinado de David y su hijo Salomón, Israel fue
consolidado como un reino grande y poderoso. Dios prometió a
David y Salomón que un Descendiente de ellos gobernaría
como un Rey eterno.
Después del reinado de Salomón,
la nación de Israel se dividió. Las diez tribus del
norte fueron llamadas “Israel,” y pasaron cerca de 200
años antes que Dios las juzgara por su idolatría:
Asiria llevó cautivo a Israel por el 721 a.C. Las dos tribus
en el sur fueron llamadas “Judá,” y ellas tardaron
un poco más, pero eventualmente ellas también, se
volvieron de Dios. Babilonia los llevó cautivos por el 600
a.C.
Cerca de 70 años después, Dios
bondadosamente trajo el remanente de los cautivos de regreso a su
propia tierra. Jerusalén, la capital, fue reconstruida por el
444 a.C., e Israel estableció una vez más su identidad
nacional. Hasta aquí termina el Antiguo Testamento.
El
Nuevo Testamento inicia 400 años más tarde con el
nacimiento de Jesucristo en Judea. Jesús fue el Descendiente
prometido a Abraham y David, Aquel que llevaría a cabo el plan
de Dios para la redención de la raza humana y restauración
de la creación. Jesús completó fielmente Su
obra: Él murió por el pecado y resucitó de los
muertos. La muerte de Cristo es la base para un nuevo pacto
(convenio) con el mundo: todo el que tenga fe (y obras - Santiago
2:24) en Jesús será salvado del pecado y vivirá
eternamente.
Después de Su resurrección, Jesús
envió a Sus discípulos a proclamar las buenas nuevas
por todas partes, sobre Su vida y Su poder para salvar. Los
discípulos de Jesús salieron en todas direcciones
proclamando las buenas nuevas de Jesús y la salvación.
Ellos viajaron a través de Asia Menor, Grecia y todo el
Imperio Romano. El Nuevo Testamento cierra con una predicción
del retorno de Jesús para juzgar al mundo incrédulo y
liberar a la creación de la maldición.
Biblia:
Preguntas y Respuestas
Recomendaciones
para leer la Biblia
1)
Orar al Espíritu Santo para recibir su luz y entendimiento.
2)
Leer con humildad, no pretendiendo tenerlo ya todo entendido.
3)
Interpretar según la Iglesia. La humildad exige que se
pregunte y estudie.
4) Leer la Biblia con frecuencia para beber
mas de la fuente.
5) Leer con el fin de amar y obedecer mas a Dios
y amar mas al prójimo
6) No buscar en la Biblia ciencia
natural sino un mensaje espiritual.
Si
tengo la Biblia, ¿para qué necesito la
Iglesia?
Necesitamos
también a la Iglesia porque:
La Iglesia es el Cuerpo De
Cristo, instituido por el mismo Jesucristo para salvarnos. No podemos
guiarnos solos: "Ninguna
profecía de la Escritura puede interpretarse por cuenta
propia" (2 Pedro 1, 20). La Iglesia, como madre y maestra, es la
auténtica intérprete y formadora a través de sus
pastores.
Aceptar y vivir esta verdad requiere humildad.
Lee en la Biblia: Hechos 2, 42; 2 Timoteo 4, 1-5.
¿A quién fue confiada la
Revelación?
Jesucristo
confió la Revelación a la Iglesia Católica. Por
medio de sus Apóstoles, por tanto, sólo la Iglesia
tiene autoridad para custodiarla, enseñarla e interpretarla
sin error.
¿Por
qué decimos que la Biblia es revelación de Dios?
"Revelación"
significa darse a conocer. A través de todas las palabras de
la Sagrada Escritura, Dios dice sólo una palabra, su Verbo
único (Jesucristo), en quien él se dice en plenitud
(Heb 1,1-3). La Iglesia, guiada por el Espíritu Santo,
determinó los libros de la Biblia y los reconoció como
revelación divina.
Dios es el autor de la Sagrada Escritura. Las verdades reveladas por Dios, que se contienen y manifiestan en la Sagrada Escritura, se consignaron por inspiración del Espíritu Santo. Dios inspira a sus autores humanos: actúa en ellos y por ellos. Da así la seguridad de que sus escritos enseñan sin error la verdad salvífica.
¿Qué es la Tradición?
La Tradición es la Palabra de Dios no
contenida en la Biblia, sino transmitida por Jesucristo a los
Apóstoles y por éstos a la Iglesia.
Las enseñanzas de la Tradición están contenidas en los Símbolos o Profesiones de la fe (por ejemplo, el Credo), en los documentos de los Concilios, en los escritos de los Santos Padres de la Iglesia y en los ritos de la Sagrada Liturgia.
¿Qué
contiene el Antiguo Testamento?
El Antiguo Testamento contiene los libros
inspirados escritos antes de la venida de Jesucristo. Son 46. Los
libros históricos del Antiguo Testamento son 21: Génesis,
Exodo, Levítico, Números, Deuteronomio (que forman el
Pentateuco), Josué, Jueces, Ruth, I y II Crónicas o
Paralipómenos, I y II Esdras (el 2º llamado también
Nehemías), Tobías, Judit, Esther, I y II Macabeos.
Los libros didácticos del Antiguo Testamento son 7: Job, Salmos, Proverbios, Eclesiastés, Cantar de los Cantares, Sabiduría y Eclesiástico.
Los libros proféticos del Antiguo Testamento son 18: Los cuatro Profetas Mayores: Isaías, Jeremías (con Lamentaciones y Baruc), Ezequiel, Daniel, y los doce Profetas Menores: Oseas, Joel, Amós, Abdías, Jonás, Miqueas, Nahum, Habacuc, Sofonías, Ageo, Zacarías y Malaquías.
¿Qué contiene el Nuevo
Testamento?
El Nuevo Testamento contiene los libros
inspirados escritos después de la venida de Jesucristo. Son
27. Los libros históricos del Nuevo Testamento son 5: Los
cuatro Evangelios (según San Mateo, San Marcos, San Lucas, San
Juan) y los Hechos de los Apóstoles.
Los libros didácticos del Nuevo Testamento son 21: Las 14 Epístolas o Cartas de San Pablo: Romanos, I y II Corintios, Gálatas, Efesios, Filipenses, Colosenses, I y II Tesalonicenses, I y II Timoteo, Tito, Filemón y Hebreos.
Las 7 epístolas o Cartas llamadas católicas son: I y II de San Pedro: I, II y III de San Juan, la de Santiago y la de San Judas.
El único libro profético del Nuevo Testamento es el Apocalipsis de San Juan.
¿Qué otras Biblias existen?
Además de la Biblia católica,
que es la única completa y verdadera, existen la Biblia Hebrea
y las Biblias protestantes. La Biblia Hebrea sólo contiene
treinta y nueve libros del Antiguo Testamento. Por tanto, rechazan
siete libros del Antiguo Testamento y todos los del Nuevo Testamento
que forman la Biblia católica. Los protestantes, por su parte,
admiten solamente el "libre examen" es decir, que cada uno
ha de leer e interpretar la Biblia a su manera, sin necesidad de
someterse a la autoridad de la Iglesia. A las Biblias protestantes
les suprimieron algunos libros que están en la Biblia
católica; además en los libros que conservan, modifican
algunas palabras para apoyar sus ideas erróneas. Además,
carecen de notas y comentarios, no tienen aprobación de la
autoridad de la Iglesia; muchas son editadas por las "Sociedades
Bíblicas", algunas dicen: "Versión del
original llevado a cabo por Cipriano de Valera y C. Reyna"; la
mayoría de ellas suprime varios libros del Antiguo Testamento
(Sabiduría, Judit, Tobías, Eclesiástico, I y II
Macabeos, entre otros) y algunas también suprimen libros del
Nuevo (Epístolas de Santiago, de San Pedro y de San Juan).
¿Puede leerse cualquier Biblia?
No. Porque puede contener errores
doctrinales o morales. Para evitar esos errores, un católico
sólo debe leer Biblias con notas y explicaciones aprobadas por
la Iglesia Católica, es decir, que tengan "Nihil Obstat"
e "Imprimatur".